Desayunando cn La2

Últimamente estoy cansado de ver siempre las mismas noticias y suelo poner cualquier cosa que echan de mañana en la televisión. Hasta navidades solía ver LaSecta, donde echaban Todo el mundo quiere a Raymond . Es la típica comedia americana y tiene momentos buenos, escapando de ese extraño humor tan soso, aunque no abundan demasiado… A destacar el viejo gruñón y las explicaciones de Raymond a su mujer.

Pero como siempre y mítico de la LaSecta, retiraron la serie, tal vez para el olvido o para otro horario más apropiado. En las noticias seguían con la crisis y el argentino que destripa las portadas de los periódicos, y un día acabé en La2.

La cosa pintaba mal, muy mal. Una copia de los teletubbies pero con una mezcla de surrealismo y deficiencia desbordante, bajo el título El jardín de los sueños que bien podría estar inspirada en alguna obra expresionista de Henri Rousseau.

El ambiente parece el de una rave al aire libre con abundante vegetación e incluso plantaciones de dudosa utilización, aves del paraíso que emiten extraños ruidos inducidos por la percepción de una mente perversa y demasiada puesta en la animación que introduce en la escena extraños personajes; un humanoide azul, una amiguita con rastas que se mueven al son de la música y sus hermanillas, un enano peinado a la dama de Elche, un tiovivo y la familia roja. Todos ellos se rodean de juguetes, malabares y un extraño dirigible que según las substancias circunstancias crean un ambiente de mal rollo, con pupilas como platos y moviendose a ritmo de psytrance,

Esta serie ha suscitado en mí una gran preocupación sobre la educación pública infantil y el interés por combinar cualquier xtrance que se precie con el visionado de este experimento visual, sin renunciar a las risas que me echo algunas mañanas a partir de las 7.55 a.m.

Acabo de econtrar un loquendo, con lo que no tengo nada más que decir..